Discurso narrativo. Justificación

El discurso narrativo alude a una serie de acciones durante una secuenciación temporal en la que existe, además,  una relación causal entre los sucesos.

Permite expresar vivencias y acontecimientos reales o ficticios y, para ello, se precisa de una organización previa de las ideas a comunicar y una buena estructuración de los elementos que las componen.

El discurso narrativo es un organizador de la experiencia humana (Bruner, 1990) y un aspecto importante del currículum escolar, ya que existe una correlación significativa entre el desempeño narrativo oral (comprensión y expresión) y el rendimiento escolar y la comprensión lectora (Pávez, M.M., Coloma, C.J. y Maggiolo, M., 2005). El dominio de la narrativa oral se transfiere a otras habilidades como la escritura y la comprensión lectora (Coloma et al., 2014).

Trabajar en las narraciones, además de contribuir a estimular contextos complejos de producción lingüística, puede servir también para mejorar otras áreas del lenguaje como vocabulario, morfología, sintaxis, prosodia, inferencias, etc..

La  incorporación de las narraciones a la intervención en el lenguaje aporta muchos beneficios para el alumnado con Trastorno del Desarrollo del Lenguaje (TDL), ya que puede usarse para mejorar las habilidades morfosintácticas (Ramirez, Acosta, Axpe y Moreno, 2018), que resultan ser unas de las más afectadas.

Esta información ha sido obtenida del libro «El desarrollo narrativo en niños: una propuesta práctica para la evaluación y la intervención en niños con trastorno del lenguaje» de Pavez, M; Coloma, C; Maggiolo, M de 2008. Barcelona. Ars Médica y del artículo «La intervención en habilidades narrativas en alumnado con dificultades del lenguaje» Revista de Logopedia, Foniatría y Audiología, 38, pag. de la 41 a la 44. Autores: Acosta, V; Del Valle, N y Ramírez, G de 2018